El Te Chai es un te originario de la India. Puede ser de té negro o té verde.
Esta compuesto por canela, cardamomo, jengibre, clavo, pimienta negra y nuez moscada.
Aqui fue donde lo probé por primera vez, en la Tea House de Lake Louise, gracias a mi gran amiga argentina Carolina, que me lo recomendó. Desde entonces no paré de tomarlo.
Este té contiene lo que equivaldría a un 1/3 de cafeína de lo que tiene el café. Se puede tomar en infusión con agua o leche. A mi personalmente me gusta mucho con leche, ya que tiene un sabor fuerte y el uso de la leche lo rebaja y le da el punto perfecto.
El te chai tiene varias propiedades, entre las que destacan:
- Ayuda a la digestión, elimina flatulencias y es útil en el tratamiento de las diarreas.
- Reduce la inflamación. es un gran aliado en el tratamiento de la artritis.
- Tiene propiedades antioxidantes que previenen enfermedades cardiovasculares. Disminuye el colesterol alto y la hipertensión.
- Alivia trastornos respiratorios: Disminuye la congestión nasal y el dolor de garganta.
¿ Que sabor tiene?
Describirlo es todo un reto hasta por paladares entrenados.
Tiene un cierto sabor picante por el jengibre fresco, aroma refrescante del cardamomo, dulce de la canela, calor de la pimienta...
Cuando se usa con té negro, éste aporta cuerpo debido a su sabor fermentado.
Para los que le guste hacerlo todo casero, ahi va la receta:
Ingredientes
- 2 cucharadas de Té verde/ Té negro.
- 1 rama de canela
- 5 semillas de cardomo verde
- 2 clavos de olor
- 1 cucharada de jengibre
- 500 mL de agua.
- Se colocan las hierbas y el agua al fuego y se hierven entre 5 - 8 minutos
- Colar las hierbas.
- En otro recipiente, se prepara el té verde y se añade la infusión anterior.
- Agregar leche.
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